sábado, 10 de abril de 2010

MI HIJO, MI PAPA Y JUANES PARTE II

Mi papá es una persona prudente para hablar y para opinar, tal vez demasiado. Su papel en situaciones conflictivas ha sido más bien pasivo, es muy radical en el manejo de sus cosas y permisivo o espectador pasivo de lo que no le afecte directamente. Pero a las personas no se les aprende sólo cuando son consejeros directos y elocuentes. Con simples comentarios cortos, frases sueltas y analogías demuestran su posición acerca de cualquier tema. Ahí es donde está la habilidad de uno para captar esa experiencia de una persona lacónica. Todo lo que sabe y lo que es se lo ha dado una vida empírica, de mucho trabajo y rutina. Es previsivo, trabajador independiente incansable, toma riesgos muy calculados, es bastante ortodoxo, no tiene siquiera educación primaria pero su empirismo e inteligencia le ha permitido tener lo que ha querido. Cuentan que de soltero por allá alguna vez fue empleado en una fábrica textil, afortunadamente yo no había siquiera nacido, hoy en día estoy seguro que si yo lo hubiera conocido como empleado yo lo sería también, sencillamente mis papás me hubieran enfocado a estudiar, tener una profesión y pasar una hoja de vida, es una opción válida, de poco riesgo y la de la mayoría de las personas, nunca contemplé esa opción y no me arrepiento. Pero sí le reclamaría que me hubiera orientado más activamente en esos primeros años de mi experiencia laboral, hubo un distanciamiento que no permitió que así se dieran las cosas, tal me hubiera ahorrado algunos años de intentos fallidos, qué le vamos a hacer. Su vida está en el campo, allá se crió, luego pasó más de 20 años acá en la ciudad y finalmente retornó a él, sé que allá morirá, allá ha encontrado su tranquilidad, en los comentarios que hace sobre los animales que cría y observa está su experiencia, el comportamiento de esos animales es su analogía implícita con la vida de las personas, es la síntesis de sus conocimientos. Viejo, un abrazo grande y fuerte, creo que usted nunca va a leer este blog, sólo me propongo que cada vez que le haga la visita en la finca le voy a atrapar alguna frase suelta para desmenuzarla e interpretarla, como la que le cogí cuando usted estaba desenjalmando al caballo, por eso la bestia ya tiene una entrada reservada acá, es la que sigue, ya hablé de mi hijo, ya hablé de mi papá, ahora le toca a Juanes… Saludos

No hay comentarios: